Comencé esta aventura en Omnilife hace 25 años (1996). Cuando fui despedido después de 29 años de servicio en el banco, de casualidad encontré un aviso de periodico que buscaba personas de 25 a 70 años, la única empresa que recibía personal sin importar la edad y sin experiencia, así comenzó todo.

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Al principio, solo había 5 productos, de los cuales me los aprendí de memoria, no había catálogos ni testimonios, pero la necesidad fue más grande, así empezó todo.  

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Comencé a vender en Lima, Perú, a conocidos, amigos y clientes del banco. Con esto pude mantener mi hogar, educar a mis hijos y pagar las deudas. Nunca imaginé que Omnilife sería el vehículo para lograr mi más preciado sueño.